
Ante la pobreza espiritual que nos amenaza desde los medios de comunicación, es cuestión de encontrar lo mejor que atesoramos dentro.
Desde dentro, asoma
el amor por la mirada,
fluye, por los labios,
con cada palabra,
vibra, en los poros,
con la pasión del abrazo.
Mece con respeto,
atento al movimiento,
el entorno amarillento,
entre jirones de emoción.
Funden, con amor,
los hielos del silencio
que siembran el tiempo
de instantes cadenciosos.
Desde dentro, mana
la sonrisa que sueña,
armoniza y acompaña.
Poema XVI
“Hacia dentro”
© César Sobrón