
Fotografía: Ieni Heras
El respeto alimenta la energía del amor, nos permite recibir lo mejor de los demás y aportar lo mejor de nosotros mismos. Con este par de poemas os deseo una semana divertida.
IV
Amar es sencillo.
Solo tiene dos leyes:
Respeto y respeto.
Respeto hacia uno mismo.
Respeto entre las voluntades
del ser elegido
para ser nuestro cómplice
al fabricar nuestro destino.
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XL
Toda palabra que surja
de los labios con respeto,
dulzura y cariño,
siempre es digna
de ser escuchada.
Y, en el mejor de los casos,
hasta puede que sea
asimilada y compartida.
“Sugerencias amatorias”
© César Sobrón